IRLANDA: VICTORIA ELECTORAL DE LA LUCHA CONTRA LA AUSTERIDAD

11/10/2014, Vicky Lara, SR Gran Canaria.

Paul Murphy, del Socialist Party, CIT en Irlanda, ha ganado el escaño en el Dáil (parlamento irlandés) por el distrito de Dublín-Suroeste tras las elecciones parciales del pasado viernes.

Este es un gran triunfo y, a la vez, un nuevo impulso para la lucha  que están librando la clase trabajadora y las masas populares de Irlanda contra los recortes y las medidas de austeridad. Paul Murphy ha utilizado su campaña electoral, y también usará su nueva posición en el parlamento irlandés, para luchar contra nuevos impuestos y ataques que se quieren imponer sobre la clase trabajadora para hacerles pagar por una crisis creada por banqueros y especuladores inmobiliarios. 

Así, por ejemplo, durante la campaña Paul Murphy participó activamente, y dio voz como candidato, a la campaña masiva de boicot de "la tasa del agua", que incluye acciones como bloqueos de calles por vecinos para evitar la instalación de contadores. Estos se pretenden instalar bajo la excusa de evitar un consumo excesivo, obviando hechos como que no hay grandes diferencias de gasto de agua en comparación con el Reino Unido (donde el agua está privatizada) y que sería mucho más eficaz que el estado invirtiera en la mejora de la infraestructura del agua para evitar fugas. En realidad el gobierno irlandés está intentando dar pasos para la privatización del abastecimiento de agua, contra la que correctamente se oponen los trabajadores irlandeses.

Paul Murphy se presentó a estas elecciones parciales a través de la "Anti-Austerity Alliance" (Alianza Anti-Austeridad), que fue impulsada por el Socialist Party pero que recoge a activistas contra las diferentes medidas de austeridad del gobierno irlandés, muchos de ellos politizados a causa de las crisis y que solamente han entrado en la lucha en los últimos años. Ésta consiguió en las pasadas elecciones locales (en mayo), 14 concejales en Dublín y otras ciudades de Irlanda. 

La Alianza Anti-Austeridad fue creada para dar una voz a la clase trabajadora, que no puede estar representada por los partidos capitalistas que dominan el espectro político, ya que estos solamente pueden ofrecer, en el mejor de los casos, una gestión diferente de los recortes a nuestros niveles de vida que imponen los mercados. En el estado español igualmente necesitamos una fuerza política capaz de luchar por nuestros verdaderos intereses y por un cambio a una sociedad socialista donde estos se respeten por encima de los beneficios empresariales.